INTIMO Y DELICADO

Determinados estímulos a los cuales muchas veces no les prestamos atención son claves para generar esas noches tranquilas, cálidas, románticas, donde una buena película, una copa de vino y tu pareja crean la situación perfecta. El vestuario es una de esas provocaciones que pueden transmitir sensaciones íntimas, dar origen a una atmósfera de armonía y dulzura. Las texturas y los colores cumplen este rol, los tejidos por la suavidad de sus hilos, por lo confortable que se sienten al roce con la piel y por la feminidad innata que irradian, se transforman en una pieza ideal para estos momentos. Combinalos con otra prenda de algodón, un lindo culote blanco y un sweater en color chocolate o arena es uno de los equipos más sensuales y finos que puede haber. Tus piernas estarán al descubierto pero acompañadas de la sutilidad y pureza de los hilos. También un buen conjunto de algodón, siempre preferentemente blanco, con un sacón pesado de perfecta e imperfecta caída a la vez y en colores tierra es exacto para la ocasión. No necesitás nada más, sólo unos toques de perfume y unas velas aromáticas porque el olfato es otro de los sentidos que despiertan los sentimientos más profundos.
Relajate, la delicadeza, la finura y la sensualidad se transformarán en las protagonistas de una noche en la que tu pareja va a sentir la suavidad de tu piel antes de tocarla.
Dejate llevar.